En marzo de 2022, tras años de retrasos debidos a cuestiones presupuestarias, se inició en la factoría de la empresa Navantia sita en Ferrol (La Coruña) la construcción de la primera fragata del tipo F-110, que, junto a sus 4 hermanas, servirán para renovar la imprescindible capacidad que dan los navíos de escolta a la Armada española.
Con 145 metros de eslora, 18 de manga y un desplazamiento 6.000 toneladas, la fragata ha sido diseñada para actuar como un buque escolta polivalente, aunque destaca por sus capacidades antisubmarinas.
Este nuevo buque destaca por su componente tecnológico. Navantia entregará a la Armada una fragata inteligente e hipersensorizada, dotada además con un gemelo digital, una de las grandes novedades del programa.
Fluidmecánica suministrará cinco cabrestantes eléctricos para aprovisionamiento en la mar para cada una de las cinco fragatas F-110.
Los equipos, que se suministrarán junto con su cuadro arrancador, pedal de permiso y consola portátil, han sido diseñados de acuerdo con los requisitos definidos por Navantia y serán aprobados y certificados por Bureau Veritas.